Slow Food denuncia el acaparamiento de tierra que están realizando paises del Golfo, China, Corea del Sur, India, Japón, etc. para resolver el problema de su escasedad de tierras para destinar a monocultivos de cereales -generalmente transgénicos-, en paises africanos, América latina, Asia y Europa del Este.
En poquísimos años este fenómeno ha adquirido proporciones considerables, ya que las transacciones han supuesto más de 50 millones de hectáreas.
Estos hechos refuerzan un modelo agrícola basado en la concentración de la propiedad y el monocultivo intesivo. Un sistema que empobrece el suelo, reduce la disponibilidad de recursos naturales, reduce la biodiversidad agrícola, aniquila los saberes tradicionales y entre otros aspectos negativos, deja en manos de la especulación los precios de los mercados.
Más información en: landgrabbing@slowfood.it
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