El turista llega a su destino, guajaruba, a poco más de una hora de Salvador de Bahía, se ha relajado, después de olvidar los problemas del trabajo y de la vida cuotididiana. Desea descansar, leer y no pensar en nada más que en la próxima bebida –seguro que una caipirosa- que la pulsera roja del “todo incluido” le permite tomar en el bar rodeado de agua de la immensa piscina.
Pero después de dejar las maletas en la habitación y de una rápida ducha, pasa a reconocer el hotel. Pasa la piscina y shock !!!!! un cartel bajo los cocos, y entre hamacas que indica peligro “area de desova de tartarugas... turtles nests area”. “Jo !!! yo no he venido para esto, pero intentaré no pisar los huevos”. Sigo, bajo a la playa y camino disfrutando del paisaje idílico. Al fondo unos jóvenes juegan al fútbol y en unos instantes pasa por detrás un vehículo de estos con las ruedas grandes (un quak o algo así). Joder !! ¿es que este pasa de la naturaleza ? pues no debe ser época de la puesta de huevos... porque el tío ha salido de debajo de otro cartel más grande que indica más o menos lo mismo, pero para nativos.
Una sugerencia: visitad a 20 minutos de Guarajuba, Praia do Forte, cuatro calles llenas de edificios bajos, rodeados de una reserva protegida y llenas de comercios para turistas, restaurantes y al final, en la playa, una fundación que por unos pocos reales os mostrará su trabajo en la zona, para velar por las tortugas.
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